Las causas de nuestros deseos

El deseo se dice del anhelo de saciar un gusto.

Desde mi punto de vista las personas tenemos deseos puros y deseos momentáneos por decirlo de algún modo.

Con deseos puros me refiero a la necesidad de cumplir una meta por nuestro amor propio y por querer demostrarnos a nosotros mismos que podemos conseguir lo que nos proponemos, sin que en estos deseos influya nada ni nadie. Me pondré a mi de ejemplo ya que es como mejor podré explicar mi punto de vista. Yo hace unos años decidí que quería llegar a tener la carrera de canto, algo que mucha gente intentó quitarme de la cabeza porque nunca había estudiado música. Yo tengo claro que es lo que quiero y que tengo que conseguir acabar mi carrera le pese a quien le pese. Esto es un deseo puro, el que a pesar de los obstáculos que te intentan poner, nunca te rindes y procuras conseguir.

Por otra parte están los deseos momentáneos. Estos son los mas usuales en la sociedad y más hoy en día que nuestra sociedad se rige por lo material y lo supérfluo más que nunca. Es cuando queremos algo porque los demás lo tienen, cuando queremos estudiar algo porque es lo que nos "conviene"... Por ejemplo y refiriéndome a lo que decía antes mi deseo de hacer una carrera de música se hubiese convertido en momentáneo si yo lo hubiese iniciado solamente porque mis padres querían, o que después de haber empezado mi carrera la hubiese dejado cuando alguien me hubiese dicho que no tenía salida. También podemos encontrar los deseos momentáneos en los aspectos mas cotidianos de la vida, como llevar una marca porque los demás la llevan, comprarse un collar porque está de moda...

No significa que sea malo tener este tipo de deseos pero muchas veces se debe a una falta de personalidad.

Por otra parte, hay mucha gente que piensa y defiende que si lleva una marca es porque le gusta o porque le apetece y que si estudia una carrera u otra es porque es lo que quiere hacer...

Sin embargo cuando la gente compra una marca en concreto al fin y al cabo es porque le influye la sociedad y si estudia una carrera u otra es por muchas razones paralelas a que le guste o no ese trabajo.

En definitiva, yo diría que tener deseos es bueno sobre todo si son deseos puros porque nos ayudan a madurar y a creces y si son momentáneos es bueno hasta cierto punto.